acaba de publicar sus reflexiones en su propia página web, y en ellas reconocía que “necesitaba un par de meses de desconexión para volver a encarrilar las cosas”.
La actriz de ascendencia dominicana y puertorriqueña, por parte de madre y padre, respectivamente, no ha vivido sólo en el glamour de Hollywood en los últimos tiempos: el pasado enero salió de la cárcel de Lynwood (California), tras cumplir 17 días de una condena de 180 días.
La actriz –a quien se valoró su buen comportamiento para ponerla en libertad- estaba en prisión por haber violado por segunda vez la libertad condicional que se le impuso tras ser detenida en dos ocasiones en 2003 por conducir bajo los efectos del alcohol, y con un permiso de conducción caducado.
Ahora ha hablado por primera vez en su propia página web (http://www.michelle-rodriguez.com/ ) sobre su experiencia, y dice que esta “pagando sus deudas con la sociedad con algunos trabajos comunitarios, como la limpieza de carreteras
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